Es de noche y llueve. La tormenta que está afuera hace que mi tormenta interior aumente, confundiéndome más.
Me paro hacia la cocina y busco un té. Abro mi velador y saco un chocolate. En la radio suena Amie, de Damien Rice, y sólo hace que me recuerde tu partida.
No sé que es lo peor; los truwenos que suenan fuera de la casa, dentro de esa oscuridad absoluta, o tu recuerdo. Ese recuerdo aprisionante y temible... ese recuerdo que me hace tan miserable... Ese recuerdo que me hace sentir tan ínfima, tan pequeña, tan mínima dentro de este puto mundo.
Ese recuerdo, de el tiempo en que me ayudaste tanto, cuando de verdad me sentía sola. cuando no tenía opción. Cuando el único que me escuchaba eras tú. Cuando no veía salida a nada, y lo únuco que nesesitaba era tiempo.
Lo peor de todo fue la espera. El verte ahí tirado, llorando, sin ser capaz de hacer nada por tí, nada más que acariciarte y verte partir, nada más que estar junto a tí, y no dejarte solo, jamás.
Porque no puedo evitar sentir que te fallé, porque sé que tu estuviste siempre para mí, cada vez que nescesitaba abnrazarte, nunca me dijiste que no. Cada vez que quería correr, sabía que podçia contar contigo para que corriéramos juntos.
Porque eras más que todo lo que el resto ve... Y tal vez no entiendan jamás lo que siento, porque nunca estubieron contigo así como yo, porque nunca sintieron tu apoyo como lo tuve yo.
Porque ese día no sabía que hacer. Eras lo único verdadero y certero, y ahora ya no te tengo.
Suena el teléfono y lo contesto. Es él, ese que es tan igual a tí... ese que siempre ha estado ahí, ese que espero no me abandonará, el único que puede hacerme olvidar que me dejaste.
Y si, te extraño. Y sí, te recuerdo, Y sí, te quiero.
Porque uno nunca se da cuenta de lo esencial que es una bola de pelos con cuatro patas que no hace nada en todo el puto día. Porque lo esencial es invisible para los ojos. Porque nunca te podré reemplazar, Porque eras único y especial para mí, Paorqeu te recordaré por siempre, y porqeu nada puede hacer que un día con tormenta, a oscuras sea bueno si no estás con migo...
Despanza en Paz.
Me paro hacia la cocina y busco un té. Abro mi velador y saco un chocolate. En la radio suena Amie, de Damien Rice, y sólo hace que me recuerde tu partida.
No sé que es lo peor; los truwenos que suenan fuera de la casa, dentro de esa oscuridad absoluta, o tu recuerdo. Ese recuerdo aprisionante y temible... ese recuerdo que me hace tan miserable... Ese recuerdo que me hace sentir tan ínfima, tan pequeña, tan mínima dentro de este puto mundo.
Ese recuerdo, de el tiempo en que me ayudaste tanto, cuando de verdad me sentía sola. cuando no tenía opción. Cuando el único que me escuchaba eras tú. Cuando no veía salida a nada, y lo únuco que nesesitaba era tiempo.
Lo peor de todo fue la espera. El verte ahí tirado, llorando, sin ser capaz de hacer nada por tí, nada más que acariciarte y verte partir, nada más que estar junto a tí, y no dejarte solo, jamás.
Porque no puedo evitar sentir que te fallé, porque sé que tu estuviste siempre para mí, cada vez que nescesitaba abnrazarte, nunca me dijiste que no. Cada vez que quería correr, sabía que podçia contar contigo para que corriéramos juntos.
Porque eras más que todo lo que el resto ve... Y tal vez no entiendan jamás lo que siento, porque nunca estubieron contigo así como yo, porque nunca sintieron tu apoyo como lo tuve yo.
Porque ese día no sabía que hacer. Eras lo único verdadero y certero, y ahora ya no te tengo.
Suena el teléfono y lo contesto. Es él, ese que es tan igual a tí... ese que siempre ha estado ahí, ese que espero no me abandonará, el único que puede hacerme olvidar que me dejaste.
Y si, te extraño. Y sí, te recuerdo, Y sí, te quiero.
Porque uno nunca se da cuenta de lo esencial que es una bola de pelos con cuatro patas que no hace nada en todo el puto día. Porque lo esencial es invisible para los ojos. Porque nunca te podré reemplazar, Porque eras único y especial para mí, Paorqeu te recordaré por siempre, y porqeu nada puede hacer que un día con tormenta, a oscuras sea bueno si no estás con migo...
Despanza en Paz.
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